Sábados 20.00hs y 22.00hs
Entradas: $150 general, $100 estudiantes y jubilados
Duración de la obra: 60 minutos.
SOLO CON RESERVA vía
Mail: selvanaranja@gmail.com
Tel: 15-3129-1736 / 2083-2455
Web: http://selvanaranja.blogspot.com.ar/p/reservas.html
Por Emiliano Basile
Antes de iniciar “Selva Naranja”, conviene prestar atención a los diferentes elementos que componen la puesta de la obra que escribe y dirige A. Federico Picasso. De un lado del monoambiente, preparado especialmente para la ocasión, vemos afiches de “Medea”, la película de Pasolini sobre el mito griego. A su lado, se encuentra el afiche de “La señora Macbeth”, versión teatral contemporánea de la clásica tragedia de William Shakespeare. En la pared de enfrente aparece un tríptico del renacimiento, que a su vez remite a la mitología bíblica: Adán, Eva y Lilith, la primera mujer según la tradición hebrea.
Ahora bien, si prestamos atención al disparador de la obra: una habitación donde Lucía (Clarisa Balcarce) se prepara para pasar una velada romántica con Eugenio (Santiago Fondevila), un antiguo y pasajero amor de quién guarda rencores del pasado, entendemos la funcionalidad de dichas imágenes que los rodean. Lucía es esa mujer misteriosa y encantadora que esconde un costado oscuro y cruel, como los distintos mitos de las mujeres de las paredes sugieren. La tensión sexual entre la pareja de la velada será interrumpida constantemente por ella (del mismo modo que Lilith evita ser sumisa con Adán), mostrando la verdadera esencia de este personaje.
“Selva Naranja” busca un espectador atento que articule las diferentes referencias explicitadas en el (mono) ambiente para la mejor comprensión de la obra. Sin ese saber previo, la puesta corre el riesgo de interpretarse como una simple tragedia contemporánea, perdiendo matices y profundidad aportados por los diferentes recursos –música, textos declamatorios, cambios bruscos de registro- en un texto que deambula entre el realismo dado por el encuentro de una pareja, y la fantasía aportada por el aura mitológica que la rodea.
En ese movimiento pendular entre una y otra lectura, aparecen las múltiples referencias, tanto a los mitos fundacionales como a las puestas contemporáneas de los mismos, en una obra que funciona desde la intertextualidad.
Selva Naranja:
ResponderEliminarMisteriosa desde la propuesta, moderna, acorde con los tiempos austeros del teatro en Buenos Aires. Una dramaturgia impecable, con mucha poesía y ritmo. La actuación de Clarisa Balcarce hace gala de su histrionismo, manteniendo el delgado límite entre lo real y lo irreal, por momentos descollante. Su partenaire, Santiago Fondevila nos acerca un trabajo parejo y sólido. La puesta en escena de Federico Picasso muestra esencialmente el ingenio de los teatristas independientes jugando en todo el espacio y resolviendo con el público dentro de la escena. Una puesta casi cinematográfica que fusiona el lenguaje de video y comic con teatro. Imperdible.
Juan Carlos Carbone